Festival Vampírico de la Ciudad de México XVIII por Dj Pio

La noche concurrió amena y tranquila, el marco cultural que expedía pintó de un negro armónico todo el lobby del Hotel Virreyes. Entre telas de terciopelo y satín, cuero y gabardina, se enfundaron los asistentes; ávidos de conocimiento más que de sangre, con sus colmillos falsos y reales, así como sus lenguas que estaban prestas a vertir las frases y comentarios de lo escuchado. Lo único doliente eran los oídos, que debido a la falla tecnológica, había que aguzarlos para captar todo lo dicho esperando que no se escapara nada; a menos claro que estuviera planeado así para evitar que simples mortales, como yo, tuvieran esa información ahora develada.


La primer ponencia a cargo de Cutberto Enríquez inicialmente trató sobre disertaciones de las concepciones vampíricas en Egipto; su deformación a través del tiempo y la confusión que genera ante la opinión actual generalizada y difundida por los medios. A su vez explicó de manera breve, concisa y muy puntual sobre el Libro de los Muertos y sus acepciones; para con esta plática empezar a desglozar las concepciones de los dioses egipcios, primordialmente sobre Osiris e Isis. Lo realmente sorprendente fue que más de la mitad de los asistentes no sabían de esos, sus orígenes antiguos; detalle que fue deshilvanándose más, gracias a la intervención de Carlos Camaleón e irlos llevando de la mano hasta los conocidos rincones de la literatura vampírica actual, momento en el cual más de uno arrojó suspiros y enarcó cejas al mencionar el nombre de Anne Rice. Por supuesto que ante estas consideraciones hace la acotación clara del mito del vampiro y su cambio de percepción al considerar el antes y después del Drácula de Bram Stoker.

Después de un respiro en el que abundaron los comentarios y percepciones adquiridos de la exposición, algunos difiriendo y otros sólo conversando de sus futuras víctimas; se dio paso a las presentaciones editoriales encabezadas por la presentación de Comikaze con su número dedicado al 40 aniversario de Vampirella, esto a cargo de Everardo Ferrer. La semblanza se hizo desde su orígen, hasta sus incursiones a nivel internacional e incluso la película y curiosidades extras, sin embargo será mejor que la lean para que se enteren bien de los datos y puedan hablar el lenguaje de sus friki víctimas para engatusarlos aún más.


Le siguió hermanado de paso, la presentación de la revista Sangre y Cenizas, contándonos los devaneos por los cuales se prendó de esto. Un proyecto que si bien inició como sólo tesis para titulación, resultó que el llamado de las sombras fue mucho más fuerte, hasta que decide buscar una forma de publicación y de salida a la información que tanto atesoró, incapaz de guardar mutis durante más tiempo. Así su travesía prosigue en manos de una editorial que para sustento del propio proyecto, terminó por diluirse a regresar a su origen oscuro y acuñado en las sombras que lo vieron nacer.

Al término de ésta se abrió el telón a Martín Borboa, cuya intervención fue el preludio para hablar de las más recientes aportaciones de Carlos Camaleón a la literatura vampírica mexicana. Se nos presentó todo un panorama diverso en el que hubo desde historias de una hoja, hasta relatos de vampiros interestelares, estos trabajos apostados ante el título de de Under ediciones; lugar en el que también encontré a Renato Guillén gran escritor y también conocedor de historieta, alma humana espero y si no pobres de mis percepciones languidecidas.

Más no conformes con esto subyugaron aún más los sentidos con las lecturas del cuento corto 'Entrevista con el Guampiro' de la Revista CpULTURA y los ya bien conocidos y aclamados trabajos de Mario Cruz. En cualquier momento pude haber sido abducida a ser comida... pero afortunadamente para el programa y la estación no fue así.

Después el alarde de que los vampiros también se divierten a cargo de 'ombliguistas'; perdón el término se me coló de otro lado, corrijo: exquisitas bellezas exóticas traidas desde lejanos lugares deleitando con sus movimientos de danza árabe, lo recomendado para dar gusto a los paladares más refinados y exigentes. Y poco después de ello, nos entregaron la frivolidad al estilo Teatre de Varietè con el concurso de disfraces en las modalidades varonil y femenil.

Cuando ya la pálida luna se entornaba en el cielo, vino la 6to Premio Vourdolack a lo mejor del Vampirismo para Cutberto Enríquez y a Alejandro Gallardo, siendo este último quien nos deleitó con sus historias y su ágil forma de envolvernos en la atmósfera de la trama. Cabe mencionar que en ese momento toda la audiencia estaba en silencio a la espectativa de lo narrado; a saber si era sólo porque esperaban un desenlace macabro o si uno o más, fueron descubiertos en sus historias, tratando de pasar desapercibidos.


El cierre definitivamente no pudo ser mejor llevado gracias a Vera, Cicatriz y Visor; quienes entre las octavas de partitura traducidas a melodías y voz de los mismos, invadieron el lobby llevándolo a un éxtasis musical; pues en el tono oscuro de la noche, elevaron esos acordes como homenaje a estos seres de la noche.

Así este mortal no descubierto para ser alimento de ellos -quiero creer eso-, agradece enormemente el apoyo prestado a Carlos Camaleón para cubrir el evento; pues tal vez sólo por el hecho de saberme vocera de prensa de la J-zone, no fui tocada; para que se pudiera preservar la tela de oscuridad en la que se protegen todos.